¿SOY ASERTIVA?

Ejercicios prácticos de la unidad 4
a.
¿Soy asertiva?
La educación recibida nos lleva a comportarnos con frecuencia con actitudes
pasivas o agresivas que no facilitan la consecución de nuestros objetivos. La
conducta asertiva es la que se ha mostrado más eficaz para defender los
propios derechos sin agredir a las demás personas, al tiempo que mantiene
alta la propia autoestima. Estos requisitos son imprescindibles para ejercer el
liderazgo. Para ello es importante saber en cuánta medida practicamos las
conductas asertivas.
Objetivo:
Medir el propio nivel de comportamiento asertivo
Procedimiento:
Buscar un espacio donde se esté a solas y sin posibilidad de
interrupciones.
Responder sinceramente las preguntas del test que se adjunta
Analizar las conductas agresivas, pasivas o asertivas que llevamos a
cabo y en qué situaciones
Realizar una valoración final y escribir las propuestas de mejora.
Metodología:
Individual
Tiempo:
1 hora y media
Materiales:
Lápiz y papel.
TEST DE ASERTIVIDAD
Test de asertividad
Quien así lo desee puede comprobar su nivel de asertividad de acuerdo con las
puntuaciones de este test.
Con
frecuencia
1
De vez en
cuando
2
Casi
nunca
3
Nunca
4
1. En una reunión difícil, con un ambiente caldeado, soy
capaz de hablar con confianza.
2. Si no estoy segura de una cosa, puedo pedir ayuda
fácilmente.
3. Si alguna persona es injusta y agresiva, puedo
controlar la situación con confianza.
4. Si alguna persona se muestra irónica conmigo o con
otras, puedo responder sin agresividad.
5. Si creo que se está abusando de mí, soy capaz de
denunciarlo sin alterarme.
6. Si alguna persona me pide permiso para hacer algo
que no me gusta, por ejemplo, fumar, puedo decirle
que no sin sentirme culpable.
7. Si alguna persona pide mi opinión sobre alguna cosa
me siento bien dándosela, aunque no concuerde con la
de los demás.
8. Puedo conectar fácil y efectivamente con personas que
considero importantes.
9. Cuando encuentro defectos en una tienda o
restaurante, soy capaz de exponerlos sin atacar a las
otras personas y sin sentirme mal.
Resultados
El mayor número en la puntuación (casillas 3 y 4) muestra un menor nivel de
asertividad. Las personas que han puntuado mayoritariamente en las casillas 3
ó 4 deben plantearse seriamente cambiar su conducta si no quieren ver
lesionados sus derechos.
b.
Mi historia
Hemos visto que la conducta asertiva es aquella que se sitúa en el punto medio
entre el comportamiento pasivo y el agresivo. Cuando una mujer se comporta
asertivamente, defiende sus propios derechos al tiempo que respeta los de los
demás.
A lo largo de la vida hay muchas situaciones que requieren una respuesta clara
y precisa, sin vacilaciones que perjudiquen la imagen de las mujeres y
condicionen su propia valoración y autoestima.
Objetivo:
Identificar situaciones conflictivas en que no has respondido con
conductas asertivas en la propia vida y proponer nuevas fórmulas para
afrontarlas
Procedimiento:
Identificar, desde la propia experiencia personal, situaciones vividas que
piensas que no han estado resueltas de una forma asertiva. Estas
situaciones pueden referirse a tus relaciones familiares, laborales,
profesionales o políticas.
Adscribir a tu comportamiento cuáles de los tres tipos de conducta has
practicado en cada una de esas situaciones predominantemente
Analizar tu pauta de actuación más frecuente ante las diversas
situaciones de la vida.
Repensar las situaciones desde un modelo de actuación asertiva.
Metodología:
Individual
Tiempo:
2 horas
Materiales:
Lápiz y papel.
c.
La Cenicienta o los cuentos de la abuela
Nuestra autoestima depende, fundamentalmente, de los modelos sociales
aprendidos durante los primeros años de nuestra vida. Estos modelos llegan a
las jóvenes desde el entorno familiar y adoptan los estereotipos culturales de la
época.
Los modelos de comportamiento que potenciarán o debilitarán la autoestima de
las muchachas no sólo se transmiten a través de la educación sino también
mediante imágenes, películas, revistas y cuentos infantiles. En la mayoría de
culturas existe el cuento de la Cenicienta (aunque tiene diferentes nombres) y
otros similares en que las chicas deben esperar al príncipe azul desde una
posición pasiva y el mantenimiento de su belleza.
Objetivo:
Mostrar cómo la autoestima y las conductas asertivas dependen de los
modelos sociales aprendidos y hacerse conscientes de ellos para
afrontarlos y superarlos en caso de que no resulten positivos para las
mujeres
Procedimiento:
Recordar tres de los cuentos principales que te explicaron cuando eras
pequeña y que posteriormente has visto en películas, libros adaptados,
cómics, etc. En la cultura occidental La Cenicienta, La Bella Durmiente del
Bosque o Caperucita Roja son ejemplos con los que puedes trabajar.
Analizar la actitud de la chica protagonista ante las situaciones que la vida
le presenta. ¿Cómo reacciona en cada ocasión? ¿Qué tipo de conducta
exhibe? ¿Qué comportamiento predomina en su actuación, el agresivo, el
pasivo o el asertivo?
Analizar las actitudes del resto de personajes femeninos que aparecen en
el cuento: madrastras, brujas, hermanas. ¿Cómo reaccionan ante los
conflictos?
Comparar estas actitudes con la de los personajes masculinos del cuento
Elaborar una ficha con las conclusiones de este ejercicio
Metodología:
Individual
Tiempo:
2 horas
Materiales:
Cuentos infantiles, lápiz y papel.
d.
El debate
Objetivo:
Identificar comportamientos inadecuados en las intervenciones públicas
de las mujeres. Aprender a neutralizar, a partir de su detección, las
actitudes pasivas o agresivas que dificultan el éxito del debate público.
Procedimiento:
Observar un debate público (en televisión o en directo) en que participe
una mujer, como mínimo.
Observar su actitud poniendo especial atención en detectar las conductas
pasivas, agresivas o asertivas de las mujeres implicadas.
Puede seguirse el siguiente guión como pauta de observación:
reaccionó?
¿Sufrió alguna de las participantes un revés total? ¿Cómo
¿Quiénes dejaron que las interrumpieran más fácilmente?
¿Aparecieron algunos argumentos inesperados?
¿Cuál era la actitud corporal de las participantes?
Realizar una reflexión sobre todos estos aspectos
Es recomendable visionar debates del entorno próximo, pero si no se
tienen a mano, puede recurrirse a analizar uno de los debates entre los
dos presidenciables demócratas a la presidencia: Hillary Clinton y Barack
Obama o bien el enfrentamiento público que hubo entre los candidatos a
la presidencia de la República Francesa, Ségolene Royale y Nicolas
Sarkozy.
¿Quién ganó el debate? ¿Con qué técnicas?
Metodología:
Individual
Tiempo:
3 horas
Materiales:
Material de vídeo, lápiz y papel.
e.
Ante el espejo
La conducta asertiva se aprende a partir de la práctica, como el resto de
conductas que realizamos. Si no la tenemos incorporada es, sencillamente,
porque no se nos ha educado en ella y no hemos tenido por tanto ni modelos ni
posibilidad de práctica durante nuestra infancia y desarrollo de nuestra
personalidad. Por el contrario, hemos interiorizado modelos de pasividad
fundamentalmente. Pero el cerebro humano tiene la capacidad de aprender a
cualquier edad, y aquí radica nuestra posibilidad de practicar la conducta
asertiva como un modo de mantener nuestra autoestima en plena salud y
poder así ejercer un liderazgo efectivo y eficiente.
Objetivo:
Practicar conductas asertivas (I)
Procedimiento:
Buscar un espacio donde se esté a solas, sin posibilidad de interrupciones
El espacio debe disponer de un sillón cómodo y un espejo de medida
grande, a ser posible
Identificar una conducta pasiva o agresiva que nos causa malestar y nos
impide el ejercicio pleno de nuestra autonomía
Diseñar la conducta asertiva que nos conduciría a resolver la situación
conflictiva
Dedicar unos minutos a la relajación antes de iniciar el ensayo
Ensayar la conducta asertiva ante el espejo siguiendo los pasos descritos
a continuación:
expresen lo que queremos obtener delante de la situación o
problema.
Expresar lo que deseo. Se trata de buscar las palabras que mejor
nos afecta a nosotras y a las personas implicadas.
Fijar el momento o lugar más oportuno para discutir el problema que
forma más detallada posible.
Describir la situación problemática que queremos cambiar de la
(yo) sin reprochar a los demás su posición o su actuación en la
situación/problema.
Expresar lo que siento en la situación/problema en primera persona
situación/problema.
Escribir el mensaje que queremos dar a la persona implicada en la
llevarla a cabo.
Ensayar la conducta asertiva en voz alta varias veces antes de
Poner en práctica la conducta asertiva.
Metodología:
Individual
Tiempo:
2 horas
Materiales:
Un espacio propio, butaca, espejo, lápiz y papel.
f.
Practicando la conducta asertiva
Para practicar la conducta asertiva es necesario ensayar repetidamente el
método básico. En este ejercicio se expone un caso real de una mujer que
desarrolla una conducta asertiva para conseguir solucionar un conflicto familiar.
Objetivo:
Practicar conductas asertivas (II)
Procedimiento:
Leer el siguiente caso:
.Una mujer de nombre Miriam desea disponer cada día de una hora de
calma y tranquilidad ininterrumpidas porque está estudiando para
presentarse a una oposición y así mejorar su estatus y nivel profesional.
Su hijo de 9 años la interrumpe constantemente con preguntas o
solicitando su atención. Su marido la reclama para que haga la cena o
con múltiples motivos relacionados con las tareas del hogar. Miriam está
cada vez más disgustada, se desconcentra constantemente y siente que
nadie respeta su necesidad de un tiempo concreto para sí misma.
Durante mucho tiempo ha aguantado la situación en silencio pero su
grado de frustración y de enojo contra su familia es cada vez mayor y hay
días en que su agresividad estalla, de manera que al final consulta con
una amiga y decide practicar una conducta asertiva..
De acuerdo con el método básico para alcanzar una conducta asertiva,
Miriam realiza los siguientes pasos:
1.
tranquila, estudiando concentrada y sin interrupciones
Imagina como le gustaría estar: Se ve en una habitación a solas,
2.
Comienza a seguir el Guión:
a)
puerta cerrada, nadie me interrumpiera con la única excepción
de un caso de verdadera emergencia. Mi hijo y mi marido
deben entender que, cuando tengo la puerta cerrada, quiere
decir que deseo estar sola para poder estudiar.
Expresar lo que desearía: Me gustaría que, cuando tengo la
b)
hijo llegue del colegio y mi marido del trabajo, antes de la cena,
hablaré con ellos de este tema
Fijar el momento y el lugar para discutir: Esta tarde, cuando mi
c)
estudiando, al menos una vez y normalmente más de una, mi
hijo y mi marido me interrumpen por cualquier motivo. Eso me
desconcentra y después me resulta muy difícil volver a estudiar
Describir la situación que queremos cambiar: Cuando estoy
d)
mal humor cuando me interrumpen constantemente en el
tiempo que dedico a estudiar. Deben saber que para mi es muy
importante lograr ese puesto y cuando no me dejan estudiar
me siento muy mal al darme cuenta de que tengo dificultades
para volverme a concentrar.
Expresar lo que sentimos en primera persona: Me pongo de
e)
implicadas en la situación: Si no me interrumpís, acabaré antes
y podré estar con vosotros un rato. En cambio, si me continuáis
interrumpiendo, como me he propuesto unas actividades
diarias de estudio, tardaré más, estaré de peor humor y os
encontrareis más solos, aunque yo no quiera.
Reflejar el guión en situaciones parecidas de tu vida y escribe los
mensajes que deberías poner en práctica.
Ensaya con ellos la puesta en práctica delante del espejo (ejercicio
número.)
Escribir el mensaje que queremos dar a la persona o personas
Metodología:
Individual
Tiempo:
1 hora
Materiales:
Lápiz y papel.